La Lista - Sin City [Final] (BigVerso)

La Lista [Parte Final]

Jack Clark un vendedor de seguros llegaba a su casa a las 12:30 am, como todos los viernes solia ir a entrenar al gym al salir de la oficina, hacía algo de cardio, bicicleta estática, un poco de pesas y al final antes de darse un duchazo y conducir de regreso a su casa con su bella esposa peleaba un par de rounds sobre el cuadrilátero, Jack estaba en buena forma física para sus 43 años.

-Jesus, María y José!!!-, grita su esposa Esperanza al verle el rostro amoratado por los golpes.

Esperanza era latina y a Jack le gustaban mucho las latinas, esa misma noche mas temprano el vendedor de seguros había visto a Rosa Martinez peleando sobre el ring de su gimnasio cómo otras tantas veces, Rosa era la profesora de Krav Maga del lugar y al terminar sus clases solía subir al cuadrilátero para pelear un par de rounds con el que quisiera desafiarla, además Jack había oído el rumor que si logras vencerla la bella mujer te invitaba a beber unos tragos de whisky en su casa.

-No paso nada grave Esperanza, al salir del gym vi a un par de muchachos, unos ladronzuelos que le robaron su bolso a una señora en la parada de autobuses y tú me conoces bien, tuve que intervenir, no fue para tanto ellos quedaron peor.

-Ave María Purísima Jack!!!, ¿ estás loco, en esta ciudad, a estas horas?, si esos muchachos hubieran estado armados te pudieron matar, espera voy a buscar un poco de hielo a la cocina para ese moretón!!!

Jack Clark no defendió a ninguna señora en la parada de autobuses esa noche, 40 minutos antes en uno de los cuadriláteros del gym «puños rojos», Jack fue el tercero en probar suerte contra los puños de Rosa Martinez, no logro terminar los 3 minutos del primer round cuando alzo sus brazos y se rindió!!!, nadie en el gym “puños rojos” conocía la verdadera historia de la profesora latina de rotundas curvas de Krav Maga, Rosa tenía 44 años pero se mantenía en tan buen estado físico y era tan bonita que todos le calculaba unos 30 o 31 años cuando mucho, Capitana de la Armada de los Estados Unidos y especialista en un comando SEAL hasta que se retiró del servicio activo 5 años atrás.

Se mudó a Sin City y fundó una empresa de seguridad con un antiguo compañero de la armada, la vida era buena para Rosa Martinez, pero tenía un problema una adicción mejor dicho le gustaba demasiado la adrenalina del combate, extrañaba sus días de militar activo, entrar en acción y jugarse la vida con sus compañeros en alguna misión peligrosa bajo fuego enemigo.

Para mitigar un poco esa necesidad comenzó a dar clases de defensa personal en el gym «puños rojos», pero eso no fue suficiente así que poco después comenzó a retar a algunos hombres buscando esa acción que tanto le faltaba aunque pocas veces los rivales le daban batalla, esta noche por ejemplo ninguno de los tres hombres que subieron al cuadrilátero duró más de un round, luego de darse un buen duchazo y cambiarse de ropa salio del gym y abordo su camioneta para conducir hasta su casa, de camino vio a tres moteros mal encarados parados frente a una tienda de abarrotes decidió calmar su necesidad de otra manera, se estaciono detrás de un Plymouth barracuda, pero antes de bajarse de su auto volvió a ponerse su ajustada ropa del gym para provocar a los tres hombres más de la cuenta.

12 minutos después de entrar por primera vez a la licorería la ex Capitana Rosa Martinez salia de la tienda nuevamente cargando con otra botella de whiskey, camino hasta su auto y se puso en marcha, no se percató que tan solo había dos moteros tirados inconscientes sobre el suelo de la entrada, el motero número 3, el mismo que le había tocado el trasero minutos antes había recuperado la conciencia poco antes de que saliera y se apresuró en llamar a su jefe Circo.

El auto de Rosa no había rodado tres cuadras cuando vio por el espejo retrovisor a media docena de moteros detrás de ella, no tuvo que revisar tenia su glock con dos cargadores extra en la guantera además de un filoso cuchillo de cazador para protegerse, pero no le harían falta pensó, redujo un poco la velocidad permitiendo que los moteros le dieran alcance y luego giro de dirección violentamente golpeando con su auto haciendolos rodar!!!, Rosa acelero dejando los atras tirados sobre el asfalto maldiciendo.

A La ex militar no tuvo tiempo de celebrar, -Ratata, ratata, ratata !!!-, los disparos de rifles de asalto AR 15 la tomaron por sorpresa desde el otro costado, mas moteros habían aparecido por una calle transversal, su auto era blindado pero no sus llantas, -Scheeeeeck!!!-, el auto derrapo estrellándose contra un poste.

Ahora si Rosa abrió su guantera y tomo sus armas las iba a necesitar, -bang, bang, bang!!!-, la ex Capitana corrió por un oscuro callejón buscando escapar de sus perseguidores cubriendo su retirada disparando a discreción con muy buena puntería, para cuando se quedó sin balas había derribado a más de una docena de moteros heridos o muertos, pero estos parecían reproducirse como alimañas.

Rosa saco su cuchillo de cazador no iba a rendirse sin dar la pelea, los moteros que llevaban armas de fuego pudieron acabar con ella en ese instante pero querían hacerla sufrir y para eso primero debian atraparla con vida, la ex Capitana golpeó a varios con sus puños y a otros los corto con su cuchillo pero eran muchos, demasiados para la experta ex militar.

-PAAAAW!!!-, un golpe a traición por la espalda con un tubo la hace perder su cuchillo y la pelea, una docena de moteros la rodean, -Paaaw, paaaw, paaaw!!!-, Rosa no podía ya ni ver de donde venían los golpes, -AAAAH!!!-, la ex Capitana ahogó un grito de dolor cuando la apuñalaron en el costado con su propio cuchillo.

-Suficiente!!!-, gritó una enorme figura sombría desde lo alto de uno de los techos del callejón antes de que Rosa perdiera el equilibrio y cayera sobre el frío asfalto.

La ex capitana estaba bastante golpeada, algo mareada por la paliza y la pérdida de sangre por su herida en el costado, -Puta madre!!!-, gritó Rosa al recuperar el aliento un minuto después cuando extrajo el cuchillo de su costado, aunque estaba bastante oscuro pudo distinguir en medio de las sombras como un hombre muy corpulento de más de dos metros de altura luchaba con los moteros que ahora si disparaban sus armas sin acusar el menor daño.

En cuestión de un par de minutos no quedo uno solo motero en pie y ninguno de ellos conservaba su cabeza sobre sus hombros. Cuando aquel gigante terminó con los moteros se acercó a Rosa, la ex Capitana pudo verificar que aquel monstruo no llevaba un cuchillo o arma cortante en sus manos -¿entonces con que diablos corto sus cabezas?-, se preguntó, Rosa tenía mucho temple pero no pudo evitar asustarse un poco había escuchado algunas historias oscuras y tenebrosas de Sin City, relatos de monstruos ancestrales escapados de la hora del lobo que acechaban por las noches a los transeúntes inocentes, aunque ella era de todo menos inocente y aquel monstruo resultó siendo su salvador, su héroe, pensó finalmente Rosa.

-Muchas gracias amigo!!!

-Ahora entiendo por que Wolfgang te puso en la lista!!!

-¿De que demonios hablas grandulón ?, ¿cual lista, y quien rayos es Wolfgang?

-Eso ya no importa Capitana Martinez tu seras mía!!!-, dijo el gigante antes de abrir su boca y mostrarle sus largos y afilados colmillos.

Fin.

*** *** *** English Version *** *** ***

The List [Final Part]

Jack Clark, an insurance salesman, arrived home at 12:30 a.m. Like every Friday, he went to the gym after work. He did some cardio, a stationary bike, and a few weights. Finally, before taking a shower and driving home with his beautiful wife, he would fight a couple of rounds in the ring. Jack was in good physical shape for his 43 years.

-Jesus, Mary, and Joseph!!!-, cried his wife, Esperanza, when she saw his face bruised from the blows.

Esperanza was Latina, and Jack really liked Latinas. Earlier that night, the insurance salesman had seen Rosa Martinez fighting in the ring at his gym, as she had so many other times. Rosa was the local Krav Maga teacher, and after her classes, she would often go into the ring to fight a couple of rounds with anyone who wanted to challenge her. Jack had also heard a rumor that if you managed to beat her, the beautiful woman would invite you to have a few shots of whiskey at her house.

-Nothing serious happened, Esperanza. When I was leaving the gym, I saw a couple of guys, some petty thieves, who stole a lady's purse at the bus stop, and you know me well. I had to intervene. It wasn't that bad, they ended up worse off.

-Hail Mary, Jack!!! Are you crazy, in this city, at this hour? If those guys had been armed, they could have killed you. Wait, I'll get some ice from the kitchen for that bruise!!!

Jack Clark didn't defend any lady at the bus stop that night. 40 minutes earlier, in one of the rings at the "Puños Rojos" gym, Jack was the third to try his luck against Rosa Martinez's fists. He didn't make it through the 3 minutes of the first round when he raised his arms and surrendered!!! No one at the "Puños Rojos" gym knew the true story of the Latina teacher with the powerful Krav Maga curves. Rosa was 44 years old, but she remained in such good physical condition and was so beautiful that everyone estimated her to be around 30 or 31 at most. She was a Captain in the United States Navy and a specialist in a SEAL commando until she retired from active duty 5 years ago.

She moved to Sin City and founded a security company with a former army buddy. Life was good for Rosa Martinez, but she had a problem: an addiction. She loved the adrenaline rush of combat. She missed her active-duty days, going into action and risking her life with her comrades on dangerous missions under enemy fire.

To alleviate that need a bit, he started teaching self-defense classes at the "Red Fists" gym, but that wasn't enough, so soon after, he started challenging men, looking for the action he was so desperately lacking, even though his opponents rarely gave him a run for his money. That night, for example, none of the three men who entered the ring lasted more than a round. After taking a good shower and changing his clothes, he left the gym and got into his truck to drive home. On the way, he saw three unfriendly bikers standing in front of a grocery store. He decided to satisfy his need another way. He parked behind a Plymouth Barracuda, but before getting out of his car, he put his tight gym clothes back on to provoke the three men even more than necessary.

Twelve minutes after entering the liquor store for the first time, former Captain Rosa Martinez was leaving the store again carrying another bottle of whiskey. She walked to her car and started driving. She didn't notice that there were only two bikers lying unconscious on the floor of the entrance. Biker number 3, the same one who had grabbed her butt minutes earlier, had regained consciousness shortly before she left and rushed to call his boss, Circo.

Rosa's car hadn't traveled three blocks when she saw in the rearview mirror half a dozen bikers behind her. She didn't have to check; she had her Glock with two extra magazines in the glove compartment, as well as a sharp hunting knife for protection, but she thought she wouldn't need them. She slowed down a bit, allowing the bikers to catch up, then swerved violently, hitting them with her car, sending them rolling!!! Rosa accelerated, leaving them behind, lying on the asphalt, cursing.

The ex-military woman didn't have time to celebrate. "Ratata, ratata, ratata!!!" The shots from AR-15 assault rifles took her by surprise from the other side. More bikers had appeared from a cross street. Her car was armored, but not its tires. "Scheeeeeck!!!" The car skidded, crashing into a pole.

Now Rosa opened her glove compartment and grabbed her weapons, she was going to need them. Bang, bang, bang!!! The former Captain ran down a dark alley, trying to escape her pursuers, covering their retreat, firing at will with excellent aim. By the time she ran out of bullets, she had shot down more than a dozen bikers, either wounded or dead, but they seemed to breed like vermin.

Rosa pulled out her hunting knife and wasn't going to give up without a fight. The bikers, who were carrying firearms, could have killed her instantly, but they wanted to make her suffer, and to do that, they first had to catch her alive. The former Captain punched several of them with her fists and slashed others with her knife, but there were too many of them, too many for the expert ex-military woman.

-PAAAAW!!!-, A sneak attack from behind with a pipe made her lose her knife and the fight broke out. A dozen bikers surrounded her. "Paaw, paaw, paah!!!" Rosa could no longer see where the blows were coming from. "AAAAH!!!" The former Captain stifled a cry of pain as she was stabbed in the side with her own knife.

-Enough!!!-, a huge shadowy figure shouted from atop one of the alley's rooftops before Rosa lost her balance and fell to the cold asphalt.

The former captain was pretty battered, a little dizzy from the beating and the blood loss from her side wound. "Fucking hell!!!" Rosa shouted as she caught her breath a minute later when she pulled the knife from her side. Although it was quite dark, she could make out in the shadows a very large man, over two meters tall, struggling with the bikers, who were now firing their weapons without causing the slightest damage.

In a matter of a couple of minutes, not a single biker was left standing, and none of them had their heads on their shoulders. When that giant finished off the bikers, he approached Rosa. The former Captain was able to verify that the monster wasn't holding a knife or a sharp weapon. "So what the hell did he cut their heads off with?" she wondered. Rosa had a lot of nerve, but she couldn't help feeling a little scared. She'd heard some dark and sinister stories from Sin City, tales of ancient monsters escaped from the hour of the wolf that stalked innocent passersby at night. Although she was anything but innocent, that monster turned out to be her savior, her hero, Rosa finally thought.

-Thanks a lot, buddy!!!

-Now I understand why Wolfgang put you on the list!!!

-What the hell are you talking about, big guy? What list, and who the hell is Wolfgang?

-That doesn't matter anymore, Captain Martinez, you'll be mine!-, he giant said before opening his mouth and showing her his long, sharp fangs.

The End.

Capitulo Anterior:
Primera parte

Escrito originalmente en Español, traducido al inglés utilizando Google Traslate.

Todas las imágenes de está publicación son propias tomadas con mi teléfono o creadas con inteligencia artificial utilizando las versiones gratuitas de los websites: Leonardo.ai, Nightcafe.studio, picfinder.ai, Tensort.art, playground.com y algunas otras páginas más, siempre usando mis propios prompts o los que comparten gratuitamente otros creadores de contenido digital.

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